Otro round en la pelea animada de Dreamworks y Pixar

Un extraterrestre de enorme cabeza azul es la nueva apuesta del estudio fundado por Steven Spielberg para superar el éxito que tuvo su competidor con Toy Story 3.
Desde mediados de la década de 1990, con la creación de los estudios Dreamworks y Pixar, los records de taquilla en el terreno de las películas de animación se ha repartido una y otra vez entre ellos dos. Ya en sus comienzos, la guerra fue intensa y frontal, con Antz saliendo a competir con Bichos en 1998. Tres años después, el enfrentamiento fue Monsters Inc vs. Shrek, y así sucesivamente, con títulos como Los Increíbles y Ratatouille luchando contra Shrek 2 y 3, Wall-E contra Kung Fu Panda, y Up contra Monsters vs Aliens.
Ahora, con el film Megamente 3D, el desafío es volver a conseguir una marca histórica. Por el momento, parece estar lográndolo, porque el estreno en los Estados Unidos y Canadá superó la barrera de los 100 millones de dólares en apenas dos semanas de exhibición. Pero su rival de esta temporada es de temer: Toy Story 3, que recaudó más de 1000 millones de dólares en todo el mundo. Aquí llegará el jueves 2 de diciembre, así que es de esperar que en los próximos días empiece a crecer la intensidad de la promoción con trailers, afiches y hasta cajitas felices.
El plan de márketing arrancó temprano: en marzo, con el primer trailer exhibido antes de Cómo entrenar a tu dragón, también de Dreamworks. Desde entonces, los realizadores han ido filtrando información, datos y rumores, hasta finalmente llegar a la feria Comic-Con y a la première mundial el 31 de octubre en Los Ángeles.
Megamente 3D es la historia de un extraterrestre azul con una inteligencia superior, que en la versión en inglés tiene la voz del cómico Will Ferrell. Llegó a la Tierra cuando tenía ocho años, enviado por sus padres antes de que un agujero negro devorara su planeta. Pero fue encerrado en una prisión por otro extraterrestre con un pasado similar, que el azar llevó a convertirse en un superhéroe llamado Metro Man (con la voz de Brad Pitt). Celoso de su némesis, Megamente se convierte en un archivillano, y uno de sus planes es secuestrar a una periodista de televisión (Tina Fey).
La vuelta de tuerca en el guión es que, una vez triunfador, Megamente se deprime al no tener con quien pelear. Su nuevo plan, entonces, es construir un nuevo superhéroe utilizando el ADN de Metro Man.
Claramente una comedia romántica llena de guiños cómplices para los adultos que irán al cine con sus hijos, Megamente 3D también hace uso de canciones clásicas de rock en diferentes escenas, como “Highway to Hell” de AC/DC, “Bad” de Michael Jackson, y “Welcome to the Jungle” de Guns N’Roses.
El director Tom McGrath, antes del estreno, contó en una conferencia de prensa los detalles del trabajo que realizó con los actores que pusieron sus voces para los dibujos.
–¿Cómo se desempeñó Will poniendole la voz al villano?
–¡Es fantástico! Tuvo que experimentar con la entonación y con los diferentes sonidos de su voz para cada uno de los personajes, y todo lo hizo genial.
–Los films animados son cada vez más innovadores. ¿Dónde creés que está la clave de Megamente?
–El alcance que puede tener es enorme. Se trata de un mundo mucho más real que en otras películas, con una ciudad real. Porque Metro City está a la escala de Chicago o Nueva York. Fue importante llevar el realismo a diferentes cuestiones y establecer riesgos. Por ejemplo, no se trata de que un dibujito pueda caer desde el piso 20 de un edificio y sobrevivir. La credibilidad de los riesgos es un factor crucial para que la gente crea lo que ve. Fue complejo llevarlo a cabo y además lograr esa sensación en 3D.
–¿Tod se hizo originalmente en 3D o fueron efectos introducidos luego?
–No. Empezó como 3D y fue mi primera película en 3D. Me preocupaba que nos hicieran usar un proceso de animación por puntos, pero por suerte eso ya pasó. Para mí, la novedad que trajo Avatar no fue las escenas de acción, sino la escenas más lentas. James Cameron incluso dijo que tuvo que hacer esas escenas más cortas, porque eran muy “inmersivas”. Sería un proceso contrario, como si fuera de “antipuntos”. Eso es lo genial del 3D. Uno cae en este mundo donde, para mí, si se utilizan las mismas reglas que en la buena cinematografía, no hay mucho misterio al hacerlo en 3D.
–¿Sos fans de los superhéroes en general?
–¡Claro! La primera película que mi familia me llevó a ver fue Batman con Adam West. Y fue también mi primera introducción al mundo de la comedia. La siguiente fue Superman, con Christopher Reeves. “Creerás que un hombre puede volar”, era el eslogan, y yo estaba convencido de eso. Me parece que era la perfecta mezcla de un superhéroe épico y una comedia.
–¿Cómo fue trabajar con Brad Pitt?
–¡Es una persona muy divertida! Yo no lo sabía hasta que vi Bastardos sin gloria. Cuando le tocó hacer su parte, fue tan físico, tan expresivo, que nosotros no podíamos contenerlo detrás de su espacio de trabajo. Tuvimos que darle un micrófono de mano. ¡Fue algo así como un Elvis vs el Alice Cooper de Will! Dándole el micrófono de mano, Brad pudo caminar por el set y realmente meterse en su personaje. Uno puede percibir su personalidad en la película y en su voz.


nota original

Comentarios

Entradas populares